Desde niña he sido una mezcla entre sobreadaptación a las normas sociales y un permanente cuestionamiento de las modas pasajeras o gustos masivos.
Mis primeros recuerdos son más internos que externos, más ligados a mis pensamientos que a hechos concretos. La mayoría están relacionados con no sentirme parte de la realidad que me rodeaba, de ahí la necesidad de crear mundos interiores propios, relacionados con la fantasía y los sueños. Todo lo anterior acrecentado por el hecho que soy hija única y padecí cierta enfermedad en la infancia que me impedía realizar las mismas actividades físicas que la mayoría de mis compañer@s de jardín, amig@s y vecin@s, aunque igual compartía algunas cosas con ell@s.
Según mi madre, mi primer apellido debió haber sido "Contreras", porque siempre estaba contradiciendo todo lo que ella decía, desde lo más elemental hasta tonteras sin argumento como que "no es postre, es jalea" o "no es comida, son fideos". ¿Cómo tan buena para discutir?.
Después pasé por una etapa en que no hablaba ni exteriorizaba mucho, pero sí recuerdo que:
- Mientras mis vecinas preferían recibir regalos como muñecas y otros, a mí me encantaba que me regalaran instrumentos musicales, de percusión o teclados pequeños o xilófonos.
- Mientras mis vecinas jugaban con sus muñecas, yo sentía la inquietud de aprender a leer. Una vez que lo conseguí no paré más, desde Condorito hasta toda la colección de Papelucho, pasando por los libros de lectura obligatoria y todos los que me llegaban de regalo, incluso me gustaba mucho la revista "Topaze", de humor político.
Años después:
- Mientras mis amigas y compañeras de colegio se compraban revistas como TV & Novelas y TV Grama, yo me leí un montón de revistas Ercilla que encontré en mi casa, que en ese tiempo estaba dedicada a cubrir temas de política internacional. Incluso la única motivación para ir al dentista o acompañar a mis papás era que en la consulta encontraría las nuevas ediciones. Además esperaba con ansias a mi papá porque llegaba con el diario "La Tercera", el cual yo devoraba con devoción, y aún más los suplementos del día viernes.
- Mientras todos mis amigos y conocidos eran hinchas de Colo Colo, a mí (ya ni sé porque) se me ocurrió ser hincha de la U, incluso con camiseta, aprendizaje de nombres de jugadores y cánticos de la barra e idas al estadio.
- Mientras mis compañeras babeaban por los integrantes de New Kids on the Block, Take That y todos esos grupos de niños bonitos con dotes dancísticas, yo me enamoré perdida y platónicamente de personajes como Eddie Vedder, Chris Cornell, Mike Patton, Álvaro Henríquez, Juan Andrés Salfate, Matías Fuentes (¿que será de él?), Alfredo Lewin, Ewan McGregor y Jay Kay. No serán muy alternativos, pero tampoco eran de gusto masivo en sus inicios, incluso los nacionales tampoco son muy agraciados en términos físicos.
- Mientras mis compañeras escuchaban música actual y radios como "Carolina", los primeros discos que escuché y disfruté fueron gracias a los hermanos mayores de ellas. Destaco el "Dark side of the moon" de Pink Floyd y "The Joshua Tree" de U2.
- Mientras mis compañeras buscaban pololo o sus primeros contactos con hombres en las fiestas del Colegio, con niños del Salesiano u otros establecimientos del sector, a mí me cargaban los escolares, excepto uno de la Scuola Italiana que me hizo alucinar con su pose hippie y su lado tan artístico. Después de él, no me enamoré hasta que conocí a mi actual pololo. Cuando nos conocimos yo estaba en 2º medio y él en 1er año de Universidad de su 2ª carrera, con todo lo que significaron los más de 5 años de diferencia y el contraste de mundos y experiencias. Pero yo con lo agrandada que era, cuando me preguntaban de qué hablaba con él, respondía que "de actualidad" ... jajaja, la pendeja pesada y densa!!!
- Mientras mis compañeras ocupaban sus tardes saliendo con amig@s y conociendo sus primeros "chupódromos", yo también iba a los chupódromos, pero antes trabajaba por puro amor al arte y satisfacción personal en una radio, en una época en que a nadie le interesaba mucho hacer otra cosa en su vida.
- Mientras mis amigas iban a "las discos del día domingo", yo prefería ir a recitales y tocatas, con las entradas que me ganaba en un programa de una radio local. Como nadie más compartía mis gustos (o no les daban permiso, si igual era re chica) iba con mi papá y lo pasábamos demasiado bien comentando y hablando de música todo el tiempo.
- Rara vez me inscribí en actividades extraprogramáticas por seguir la tendencia y preferencias dominantes. Tomaba los cursos que me interesaban y siempre fui bien independiente, disfrutaba las salidas en grupo, pero si andaba sola lo pasaba igual de bien y conversaba con todo el mundo, desde alguien en la calle, hasta los vendedores de la feria artesanal. Lo mismo me pasó en la U, con los electivos, voluntariados y prácticas.
De a poco fui ampliando mi mundo social, conociendo y valorando a algunas de mis compañeras que eran tan o más diferentes al resto que yo, me hice amiga de ellas y esa relación perdura hasta el día de hoy. También establecí relaciones por fuera con ciertas personas que se sentían aún más desadaptadas al sistema formal y a lo establecido o convencionalmente esperado, que me facilitaron el acceso a mucha música, películas, libros y lugares que no conocía.
Ahora ya estoy más tolerante a las diferencias y a los distintos gustos y opciones de vida, pero tampoco me sumé a la masa. Finalmente mis amigos y amigas tampoco responden a los estereotipos típicos y algunos tienen hobbies un poco exclusivos o, dentro de lo clásico (leer, escuchar música, ver películas), tampoco se guían mucho por los gustos masivos. No creo que sea de "pose", es querer explorar otras alternativas además de lo conocido a niveles populares. Incluso lo que fue alternativo en algunos momentos después se masificó.
Si hay algo que destaco de Internet es la creación de foros y sitios para fanáticos de las cosas más diversas, lo que permite intercambiar opiniones y conocer personas que comparten tus gustos, independientemente de la distancia geográfica. Hay fanáticos hasta de lo más extraño, y los adolescentes son más diferenciados que antes.
A esta edad ya no soy tan "alternativa", sólo puedo decir que:
- Mientras todo el mundo ve, alucina y comenta "Lost" y "The Sopranos", yo no las vi. La última serie popular que vi fue "The X Files". Como no tengo cable, me conformo con "Nip/Tuck" (¿la volverán a exhibir en TVN?) y "Dr House" (amo sus comentarios amargados y sarcásticos). Incluso vi una serie que se llamaba "Cold Case" (si alguien más la vio que me avise, jaja).
- Mientras la mayoría de mis ex compañeras de colegio y de Universidad, primas, amigos y conocidos hicieron un fotolog (lo que no encuentro malo) pensé que si iba a revelar parte de mí en el ciberespacio sería a través de un blog, ya que permite desarrollar mejor las ideas (ni se nota que me gusta extenderme) y eleva el nivel de los comentarios, más allá de "ta lenda tu pic" y esas cosas que la gente se escribe en ese lenguaje "teletubbitesco" tan típico de los usuarios de los fotolog.
Canciones: "El Revelde" (La Renga)
"Suicídate" (Los Miserables)
"No Rain" (Blind Melon) sólo por el video.
Mis primeros recuerdos son más internos que externos, más ligados a mis pensamientos que a hechos concretos. La mayoría están relacionados con no sentirme parte de la realidad que me rodeaba, de ahí la necesidad de crear mundos interiores propios, relacionados con la fantasía y los sueños. Todo lo anterior acrecentado por el hecho que soy hija única y padecí cierta enfermedad en la infancia que me impedía realizar las mismas actividades físicas que la mayoría de mis compañer@s de jardín, amig@s y vecin@s, aunque igual compartía algunas cosas con ell@s.
Según mi madre, mi primer apellido debió haber sido "Contreras", porque siempre estaba contradiciendo todo lo que ella decía, desde lo más elemental hasta tonteras sin argumento como que "no es postre, es jalea" o "no es comida, son fideos". ¿Cómo tan buena para discutir?.
Después pasé por una etapa en que no hablaba ni exteriorizaba mucho, pero sí recuerdo que:
- Mientras mis vecinas preferían recibir regalos como muñecas y otros, a mí me encantaba que me regalaran instrumentos musicales, de percusión o teclados pequeños o xilófonos.
- Mientras mis vecinas jugaban con sus muñecas, yo sentía la inquietud de aprender a leer. Una vez que lo conseguí no paré más, desde Condorito hasta toda la colección de Papelucho, pasando por los libros de lectura obligatoria y todos los que me llegaban de regalo, incluso me gustaba mucho la revista "Topaze", de humor político.
Años después:
- Mientras mis amigas y compañeras de colegio se compraban revistas como TV & Novelas y TV Grama, yo me leí un montón de revistas Ercilla que encontré en mi casa, que en ese tiempo estaba dedicada a cubrir temas de política internacional. Incluso la única motivación para ir al dentista o acompañar a mis papás era que en la consulta encontraría las nuevas ediciones. Además esperaba con ansias a mi papá porque llegaba con el diario "La Tercera", el cual yo devoraba con devoción, y aún más los suplementos del día viernes.
- Mientras todos mis amigos y conocidos eran hinchas de Colo Colo, a mí (ya ni sé porque) se me ocurrió ser hincha de la U, incluso con camiseta, aprendizaje de nombres de jugadores y cánticos de la barra e idas al estadio.
- Mientras mis compañeras babeaban por los integrantes de New Kids on the Block, Take That y todos esos grupos de niños bonitos con dotes dancísticas, yo me enamoré perdida y platónicamente de personajes como Eddie Vedder, Chris Cornell, Mike Patton, Álvaro Henríquez, Juan Andrés Salfate, Matías Fuentes (¿que será de él?), Alfredo Lewin, Ewan McGregor y Jay Kay. No serán muy alternativos, pero tampoco eran de gusto masivo en sus inicios, incluso los nacionales tampoco son muy agraciados en términos físicos.
- Mientras mis compañeras escuchaban música actual y radios como "Carolina", los primeros discos que escuché y disfruté fueron gracias a los hermanos mayores de ellas. Destaco el "Dark side of the moon" de Pink Floyd y "The Joshua Tree" de U2.
- Mientras mis compañeras buscaban pololo o sus primeros contactos con hombres en las fiestas del Colegio, con niños del Salesiano u otros establecimientos del sector, a mí me cargaban los escolares, excepto uno de la Scuola Italiana que me hizo alucinar con su pose hippie y su lado tan artístico. Después de él, no me enamoré hasta que conocí a mi actual pololo. Cuando nos conocimos yo estaba en 2º medio y él en 1er año de Universidad de su 2ª carrera, con todo lo que significaron los más de 5 años de diferencia y el contraste de mundos y experiencias. Pero yo con lo agrandada que era, cuando me preguntaban de qué hablaba con él, respondía que "de actualidad" ... jajaja, la pendeja pesada y densa!!!
- Mientras mis compañeras ocupaban sus tardes saliendo con amig@s y conociendo sus primeros "chupódromos", yo también iba a los chupódromos, pero antes trabajaba por puro amor al arte y satisfacción personal en una radio, en una época en que a nadie le interesaba mucho hacer otra cosa en su vida.
- Mientras mis amigas iban a "las discos del día domingo", yo prefería ir a recitales y tocatas, con las entradas que me ganaba en un programa de una radio local. Como nadie más compartía mis gustos (o no les daban permiso, si igual era re chica) iba con mi papá y lo pasábamos demasiado bien comentando y hablando de música todo el tiempo.
- Rara vez me inscribí en actividades extraprogramáticas por seguir la tendencia y preferencias dominantes. Tomaba los cursos que me interesaban y siempre fui bien independiente, disfrutaba las salidas en grupo, pero si andaba sola lo pasaba igual de bien y conversaba con todo el mundo, desde alguien en la calle, hasta los vendedores de la feria artesanal. Lo mismo me pasó en la U, con los electivos, voluntariados y prácticas.
De a poco fui ampliando mi mundo social, conociendo y valorando a algunas de mis compañeras que eran tan o más diferentes al resto que yo, me hice amiga de ellas y esa relación perdura hasta el día de hoy. También establecí relaciones por fuera con ciertas personas que se sentían aún más desadaptadas al sistema formal y a lo establecido o convencionalmente esperado, que me facilitaron el acceso a mucha música, películas, libros y lugares que no conocía.
Ahora ya estoy más tolerante a las diferencias y a los distintos gustos y opciones de vida, pero tampoco me sumé a la masa. Finalmente mis amigos y amigas tampoco responden a los estereotipos típicos y algunos tienen hobbies un poco exclusivos o, dentro de lo clásico (leer, escuchar música, ver películas), tampoco se guían mucho por los gustos masivos. No creo que sea de "pose", es querer explorar otras alternativas además de lo conocido a niveles populares. Incluso lo que fue alternativo en algunos momentos después se masificó.
Si hay algo que destaco de Internet es la creación de foros y sitios para fanáticos de las cosas más diversas, lo que permite intercambiar opiniones y conocer personas que comparten tus gustos, independientemente de la distancia geográfica. Hay fanáticos hasta de lo más extraño, y los adolescentes son más diferenciados que antes.
A esta edad ya no soy tan "alternativa", sólo puedo decir que:
- Mientras todo el mundo ve, alucina y comenta "Lost" y "The Sopranos", yo no las vi. La última serie popular que vi fue "The X Files". Como no tengo cable, me conformo con "Nip/Tuck" (¿la volverán a exhibir en TVN?) y "Dr House" (amo sus comentarios amargados y sarcásticos). Incluso vi una serie que se llamaba "Cold Case" (si alguien más la vio que me avise, jaja).
- Mientras la mayoría de mis ex compañeras de colegio y de Universidad, primas, amigos y conocidos hicieron un fotolog (lo que no encuentro malo) pensé que si iba a revelar parte de mí en el ciberespacio sería a través de un blog, ya que permite desarrollar mejor las ideas (ni se nota que me gusta extenderme) y eleva el nivel de los comentarios, más allá de "ta lenda tu pic" y esas cosas que la gente se escribe en ese lenguaje "teletubbitesco" tan típico de los usuarios de los fotolog.
Canciones: "El Revelde" (La Renga)
"Suicídate" (Los Miserables)
"No Rain" (Blind Melon) sólo por el video.
1 comentario:
_Lo mejor de ser diferente es que siempore marcaras una diferencia y la adaptacion la hace el medio y no tu, haces que la gente aprenda a hacer otras cosas y no solo a `pensar en cosas profanas y vulgares llamse pini-ron o Luly, los que marcan la diferencia en el mundo tienen la llave al cambio solo, de la mano de gente como tú el mundo mprobablemente será mejor.-
Publicar un comentario