¿Por qué no aprendo a manejar?

Definitivamente hoy no tengo ganas de escribir de la cesantía, ni de los temas que hablamos el otro día con mi amiga y que me encargó que escribiera ("La inutilidad de la vocación" y "Recompensa Final"). Como que no me nace.

¿Será que ando demasiado relajada, o algún extraño efecto post fin de semana en Horcón? Me volé con el puro aire y el olor a asado. ¿O será mucha sobredosis de Inti Illimani y Janis Joplin esta tarde? No lo sé ... quizás sea que veo alguna luz de esperanza para abandonar este estado de desocupación no remunerada, o que liberé lo poco que me quedaba de ansiedad a fuerza de cantar, bailar y reírme en cantidades industriales con un grupo de personajes que me encantaría que todos y todas conocieran. Porque realmente es impresionante la manera en que se divierten con sólo una cabaña, copete, comida, música (en vivo y envasada), recuerdos, anécdotas, talentos varios (algunos más útiles o convencionales que otros) y una amistad de años y años ... ya tienen toda una historia como grupo, y disfruto mucho siendo cercana a ellos (a uno de sus integrantes en especial).

El asunto es que a este mítico y místico lugar se puede llegar después de un eterno y agotador viaje de mínimo 2 horas en bus, lo que disminuye bastante si tienes la cueva de ir en auto (propio, prestado o de pasajero) y ahorrarte toda esa vuelta infinita por Quintero.

Este hecho, sumado a:
- enterarme que faltan mil conductores para que el TMV (Transporte Metropolitano de Valparaíso ... ¿por qué es "Metropolitano" si estamos en Valpo? no entiendo, ah!) funcione de acuerdo a las expectativas y a lo planificado originalmente
- que casi cualquiera (con un poco de plata estable y ganas) puede tener un auto, gracias a los innumerables préstamos y créditos bancarios existentes;
me ha hecho llegar al cuestionamiento respecto a si alguna vez tendré auto para irme el fin de semana a donde quiera, por donde quiera y a la hora que quiera, sin importar a que hora pasa el último bus de vuelta y sin depender de otras personas para viajar.

Pero pensándolo bien, creo que el problema no está en tener las condiciones para adquirir un auto y mantenerlo. Pienso que mi conflicto está en hacerlo funcionar con mis propias manos.
He estado años convenciéndome que tengo cero habilidad para esas cosas.

Después de años de autoconocimiento y autoanálisis, y de acuerdo a la "teoría de las inteligencias múltiples" de Howard Gardner, podría decir que tengo más o menos desarrolladas la:
- Inteligencia Verbal o Lingüística: Es la capacidad de utilizar eficazmente las palabras, ya sea en las áreas de lectura o escritura ... Es cosa de leer este blog no más, jajaja.
- Inteligencia Lógica o Numérica: Es la habilidad de entender y trabajar con números, es decir, con la lógica. Por lo menos no me complico con el vuelto de la micro ni pa´ calcular pa cuantos copetes me alcanza la plata con la que salí.
- Inteligencia Intrapersonal o Emocional: Es la parte interna de nuestro ser, la que maneja –o no- las emociones, las fortalezas, las limitaciones del propio ser ... No sé si las manejo tanto, pero pucha que las ventilo e hiperventilo intensamente ...
- Inteligencia Interpersonal: Es la que permite desarrollar relaciones satisfactorias con los demás. Ser empáticos –ponerse en el lugar del otro-, y lograr la confianza y el respeto de la gente ... Bueno, de las otras podría hasta dudar, pero de esta ... JAMÁS!!!
- Inteligencia Física o Kinestésica: Tiene que ver con el deporte, la danza, y todo lo que involucre el cuerpo y las manos; con la armonía entre el cuerpo y la mente. Incluye habilidades físicas específicas como la coordinación, destreza, fuerza, flexibilidad, balance y velocidad. Es la que poseen los atletas profesionales, pero también es la de los cirujanos, o los pilotos de aviones.
En esta última como que me entro a complicar ... O sea, para bailar soy seca (desde cueca hasta cumbia, pasando por reggaeton, salsa y otros ritmos tropicales varios), pero ya "entrando a picar" en lo demás, como el deporte y todas esas habilidades físicas ... ahí sí que estamos guateando heavy y por eso digo que me costaría "la media caleta, así por ser" (como diría alguien por ahí) aprender a manejar.

De partida, para los deportes soy negada. Con cueva he hecho gimnasia aeróbica (porque tiene música no más) y para los "deportes con balón" no hay caso ... ¿Alguien se acuerda que en MTV hace varios años atrás daban una serie de dibujos animados, cuya protagonista (que daba nombre a la serie) se llamaba Daria? Y si la vieron, ¿recuerdan esa escena de la presentación donde le lanzaban la pelota de voléibol, ella estiraba el brazo (sin moverse un centímetro) y la pelota le pasaba por el lado? ... Esa soy yo, y peor ... lo comprobaron mis multideportistas compañeros de la U, que gozaban con mis antihabilidades. Otra cosa es "andar arriba de la pelota" y ahí si que hasta podría hacer clases, jaja.

Para qué hablar de términos como coordinación, balance y velocidad. Con suerte llevo una taza o un plato en cada mano, de lo contrario dejaría desabastecida de loza a medio Chile ... sería peor que la Titi de "Casado con Hijos" en ese capítulo donde trabajó de mesera en la fuente de soda de" Don Lomo" (cuando servía todos los platos cambiados y se le caían todos los completos encima de los clientes ... que es el mismo capítulo donde Nachito hace su histórico baile "Luces altas, luces bajas", con "doble airbag" y todo).

En términos de coordinación, apenas domino la diferencia entre izquierda y derecha (políticamente no, por suerte) y entre arriba y abajo (al centro y pa´adentro como que nos entendemos mejor); así que si me hablan de freno, acelerador, embriague, cambios y la función de cada uno de los botones, palancas y cosas varias que tienen los autos además del volante, la bocina y la radio, me complico demasiado, aunque me han explicado como mil veces de manera teórica. Para que decir que con suerte sé que hay que echarle combustible.

A eso habría que sumarle que tengo cero sentido de las distancias y las proporciones (a grandes escalas). Aunque supiera manejar no podría estacionar porque haría trizas o mil pedazos (a lo más Christina y los Subterráneos) el vehículo, más aún en esos aparcaderos de supermercados que siempre están llenos. Sería peor que esos viejitos que se meten con auto y todo a los bancos y a las ferias.

Aunque más, pero mucho más peor que todo lo anterior, es mi nulo sentido de la orientación. Con suerte sé por donde pasa la micro y cuando estoy mucho rato en una tienda no me acuerdo por donde está la salida. Andaría siempre manejando en sentido contrario, metiéndome en calles sin salida y me entraría a desesperar en todas esas calles que no tienen nombre (como diría U2) o en lugares en que no he estado antes.

Reconociendo lo anterior (y que igual me daría lata manejar un domingo en la noche de vuelta por carreteras poco iluminadas y con el cansancio acumulado) y que me encanta andar en auto (no soy "poto con ruedas", pero pucha que me gusta), no me queda otra que ganar mucha plata (¿aooondeee?) para andar en puro colectivo o llamar un radiotaxi. O si tuviera más plata, comprarme un auto y contratar un chofer ... aunque mejor sería vivir con alguien que me amara mucho (como pa salir a pasear seguido a puros lugares bellos de este país) y supiera manejar. Algún día será ... por lo menos la persona existe ... y yo también lo amo mucho. Paciencia, que algún día dejaremos de andar en autos prestados y también dejaremos de babear cada vez que vemos un auto de un modelo que nos gusta.

Canciones de hoy: "Amores incompletos" (Los Tres) y "Copacabana"(cover de Los Tres en su histórica presentación en el Teatro California) ... Nada que ver con lo que escribí, pero me acuerdo de este notaaableee fin de semana.

Frase de la semana: "Calmao, looocooo, tssssss. Toy súper drogao" .... En homenaje a cierta persona que no estuvo presente ni invitada, pero de la cual nos acordamos mucho, sólo porque es asiduo visitante de Horcón y cercano a varios de los que sí estuvimos en ese carrete de antología.